Un grave hecho de inseguridad ocurrió este viernes por la tarde muy cerca del a Parroquia Nuestra Señora de La Paz en la ciudad de Santo Tomé, vecina a la capital provincial.
El incidente tuvo como víctima al propio responsable del templo católico, un hombre de 50 años.
El religioso terminó de rezar dentro del edificio -en la cuadra de calle Alberdi al 1700- cerca de las 18 y luego caminó para llegar a su hogar, a unos cien metros de distancia.
Cuando llegó al domicilio, el párroco se sorprendió al ver que una reja había sido arrancada. Escuchó ruido dentro del inmueble y no dudó en ingresar.
Adentro del dormitorio, se topó con el ladrón, que revisaba el cajón de la mesita de luz.
El sacerdote le gritó al delincuente, pero recibió por toda respuesta un golpe de puño en el rostro que lo puso fuera de combate.
El malviviente aprovechó el momento para escapar, para lo cual se subió a la bicicleta de la víctima, una playera rodado 26, que perdió el asiento antes de ser montada.
Las actuaciones se siguen en la Subcomisaría 9na, la dependencia de la Unidad Regional I que tiene jurisdicción en ese sector santotomesino.