La madre de un alumno entró al aula de tercer grado de la escuela de barrio La Orilla de Esperanza y frente a todos los chicos golpeó brutalmente a la docente, que estaba haciendo un reemplazo.
“Fue una situación muy violenta, los alumnos lloraban asustados. La maestra quedó muy lesionada”, relató una persona que pidió reservar su identidad.
Tras la agresión se realizó una denuncia contra la mujer y ahora la Justicia investiga el caso.
A la docente le quedaban algunos días de reemplazo, pero decidió renunciar a ese trabajo.
Por el momento se desconocen los motivos que la llevaron a actuar de esta manera, pero está claro que no hay justificativos para atacar a una docente.
En caso de estar disconforme con alguna cuestión, se puede acudir a la dirección, al supervisor o directamente al Ministerio de Educación, pero con la violencia jamás se soluciona nada.
Segundo ataque en pocos días
También que la semana pasada hubo una agresión similar a una docente en una escuela de la zona sur de Esperanza.
Sin dudas se trata de un problema social que preocupa a todos y que, más allá de lo que puedan hacer las autoridades, requiere que el tema se aborde en cada familia con el objetivo de que no vuelva a repetirse.