La Agencia de Investigación Criminal que depende del Ministerio de Seguridad de Santa Fe, junto con funcionarios policiales de la provincia de Buenos Aires, allanaron este miércoles una vivienda en el Partido de La Matanza, donde detuvieron a una mujer por estar implicada en varias estafas cometidas por redes sociales.
La investigación judicial inició tras la denuncia de la víctima en Esperanza, tras confirmar el robo de su red de whatsapp en manos de una persona que se hizo pasar por una funcionaria del Ministerio de Salud. En su ardid, la supuesta funcionaria le solicitó datos personales cuya maniobra le permitió adueñarse de su red social y solicitar a los contactos de la víctima el depósito de dinero en una cuenta bancaria.
Tras la maniobra delictiva y la efectivización de la denuncia, los pesquisas de la AIC realizaron diversas labores de campo que permitieron identificar a la posible infractora. De esta manera, con los oficios librados por el Dr. Nicolás Falkenberg, la participación de la Fiscalía del Dr. Alejandro Benítez y la colaboración del Juzgado de Garantías N° 5 del Partido de la Matanza a cargo del juez Dr. Gustavo Banco, se llevó a cabo el allanamiento en un domicilio situado en calle Lambare al 4600 de La Tablada en el Partido de La Matanza, provincia. de Buenos Aires.
En el lugar se detuvo a la mujer, a quien también se le secuestró dinero en efectivo y un dispositivo celular que aporta valor a la investigación.
Peligroso clan
La acusada es hija de Hernán Ariel Rearte, alias “El Flaco”, un conocido delincuente de Buenos Aires acusado de ser el organizador de un asalto que derivó en el crimen de María Caccone, el 14 de febrero de 2019, cuando la mujer, empleada administrativa de un frigorífico, llevaba una fuerte suma de dinero en un remís para realizar un depósito en un banco y fue asesinada de un balazo.
Rearte fue detenido en la zona conocida como Fuerte Apache, donde vive, en una de las zonas más peligrosas de Buenos Aires.
Rearte además es primo del conductor del auto de alquiler que llevó a la víctima al banco, acusado de ser el presunto “entregador”.
El Flaco tiene una extensa carrera delictiva. Cuenta con causas por robo, tenencia de armas y piratería del asfalto.
Se cree que este tipo de estafas como la que sufrieron los vecinos de Esperanza inician en la cárcel y que los presos utilizan “colaboradores” de afuera para transferir el dinero.