Beatriz y Daiana son madre e hija, y el viernes pasado vivieron una situación extrema en inmediaciones del hospital Mira y López de la ciudad de Santa Fe. Una joven de 19 años se les acercó a la salida de un cajero automático y les entregó a su bebé de cuatro meses, argumentando que no podía hacerse cargo del pequeño.

En diálogo con Aire, las mujeres relataron con detalles cómo se dio la situación y qué hicieron con el niño luego de que la madre lo entregara y se retirara. Beatriz, que es mamá de 14 hijos, dijo: “Me abataté y lo traje a mi casa. Le compramos pañales y lo cambiamos, le conseguimos ropita y lo abrigamos porque tenía frío y no paraba de llorar”.

Luego, se acercaron con el bebé hasta la Subcomisaría 17 donde les informaron que debían entregar a la criatura que luego fue trasladada al Hospital Iturraspe para recibir atención médica.

“A mí me nació del alma traerlo a casa. Crié 14 hijos y ese bebé me llama la atención”, contó afligida Beatriz, que expresó su deseo de adoptarlo legalmente y a quien ahora le preocupa cuál será su situación judicial luego de haber actuado “de corazón” para cuidar al niño en ese momento.

Por su parte, la secretaria de Niñez, Adolescencia y Familia de la Provincia de Santa Fe, Patricia Chialvo informó a Aireque el bebé está en condiciones de ser dado de alta, pero todavía se encuentra en el hospital hasta tanto se defina a la guarda de quién quedará a futuro.Está acompañado por un acompañante personalizado de la secretaría y por los abuelos del menor, que llegaron desde Rafaela apenas su hija se comunicó con ellos y les contó lo que había hecho.

Sobre la joven, Chialvo contó que presenta cierto grado de discapacidad y que se había fugado de su casa, razón por la que la familia ya había hecho una denuncia de búsqueda de paradero.

“Se fue entrevistando a toda la familia que se presentó para saber quién estaría en condiciones de alojar al bebé en el egreso, y, por otro lado, dimos cuenta de la situación a la delegación de Niñez en Rafaela que está trabajando la situación de ella (la mamá) allá, para conocer por qué se fue de la casa”, detalló la funcionaria, y explicó que en estos casos siempre se trata de priorizar que los menores permanezcan con gente que forme parte de la familia ampliada.

“El tener un acompañante nos permite observar como se vinculan los familiares con el niñito. A partir de esto, vamos a decidir si la familia ampliada va a poder alojar al bebé o va a ser necesario otro tipo de intervención, porque claramente hoy no puede volver a ser la progenitora”, cerró Chialvo.